Si le preguntaras a alguien que ha aprendido por lo menos un idioma cuánto tiempo le llevó manejar esa nueva lengua, es posible que te responda de manera filosófica y profunda algo como: “Aprender un nuevo idioma es un trabajo que toma toda la vida”. Es una frase que suena intelectual, de esas que puedes decir mirando al horizonte con cara seria o encontrar en una imagen viral en internet. Por una parte, le doy la razón, volverse un experto de un idioma (incluso el propio) podría llevarte toda la vida. Pero esa frase no responde al 100% tu pregunta inicial, es decir “¿Cuánto tiempo puede llevar manejar un nuevo idioma?”.
Hay algo de lo que poca gente habla cuando aprende otro idioma, saber dos o más idiomas viene acompañado con cierto sentimiento de superioridad. Lo cual explica ese “trabajo de toda la vida” del que te hablaba tu erudito amigo.
Yo he sentido en carne propia esa voz en mi cabeza cuando escucho alguien leyendo en inglés de manera desastrosa, esa parte de mí que se regodea en saber que hay algo que nos separa. Dejando todo sentimiento de superioridad de lado, y créeme que me cuesta mucho admitirlo, la verdad es que aprender otro idioma en el mundo actual es mucho más sencillo de lo que pueden pintarlo algunos.
Creo firmemente que si todos supieran lo sencillo que es dominar un idioma extranjero mucha más gente estaría dispuesta a hacerlo. Desde los más pequeños que parecen una esponja absorbiendo con facilidad nuevos conocimientos, hasta los más adultos que se refugian en esa excusa que dice que un loro viejo no aprende palabras nuevas.
Es por ello que decidí mezclar un poco de mi experiencia en el camino de aprender un nuevo idioma, en mi caso el inglés, con las experiencias de otras personas, para hablar de aquellas herramientas y métodos que aplicamos para llegar hasta donde estamos hoy. Desde inscribirse en una academia de idiomas en Madrid hasta ir a una embajada y hacerse amigo de uno de sus empleados, estas son las 7 cosas que te ayudarán a completar tu meta de manejar un nuevo idioma.
Es importante que recuerdes que estos pequeños consejos vienen de personas que al día de hoy pueden decir que dominan por lo menos dos idiomas. Sin embargo, solo tu dedicación puede marcar una diferencia real entre el nivel de inglés al que estás apuntando y el nivel que alcanzarás. Ahora que tenemos esto claro, ¡vamos allá!
1. “Ve de lo necesario a lo banal”
Algunos cursos de inglés en Madrid, aplicaciones, entre otros métodos de aprendizaje; se enfocan en enseñar el idioma por bloques de conocimiento. Por ejemplo, en el módulo de familia te enseñan cómo decir madre y te enseñan cómo decir tatarabuela; en el módulo de comidas te dicen que cena es dinner y que pescado frito se dice fried fish.
Pero, ¿cuáles de estos datos son aplicables para aquello que te motivó a aprender un idioma? Si vas a tener una conversación en el mundo real, a menos que te guste mucho el pescado en su versión frita, es posible que no encuentres la ocasión de utilizarlo tanto como usarás aquella palabra que te llevará al restaurante con las mejores opciones para una cena.
Si necesitas hablar inglés porque te dedicarás al mundo de los negocios, entonces busca un curso o material didáctico (audiovisual o escrito) que se adapte a tus necesidades, como revistas que manejen un lenguaje técnico aplicable a este ambiente o series de tv que se desarrollen en oficinas, por ejemplo.
Este mismo consejo aplicará con el resto de temas de interés, empieza por aquello que tendrás 100% de seguridad que será necesario (todos necesitamos saber que be es el verbo en inglés para ser y estar) y a partir de allí vas desarrollando tus conocimientos del idioma que deseas adquirir.
De cualquier forma, en la American Academy EXAM Madrid lo tienes todo a tu disposición, con un método basado en la práctica completamente novedoso, alejado de los cursos de inglés en Madrid anticuados y convencionales.
2. “Si no puedes viajar, simúlalo”
Si quieres aprender a hablar italiano, ve a Italia y si no puedes realizar este viaje, entonces que Italia venga a ti. Claro está, si tienes la posibilidad de conocer la Torre de Pisa por tu cuenta, ¿qué haces aquí leyéndome? ¡Ve! Lo ideal al aprender un idioma es que por lo menos una parte de tu aprendizaje se desarrolle en un país donde se hable en dicha lengua. Lamentablemente, no todos tenemos esta posibilidad y ello no debe suponer un impedimento para tu enseñanza.
La buena noticia es que, en el mundo actual, donde domina la tecnología, con muy poco esfuerzo podemos traer pedacitos de un país a nuestra palma de la mano. Puedes comenzar por cambiar tus dispositivos móviles al inglés, si es ese el idioma que escogiste, o al que tengas en mente. Luego puedes descargar unos cuantos podcasts, para escuchar en tu camino al trabajo o a la universidad. Hacer amigos por internet con aplicaciones de aprendizaje de idiomas es otro método infalible ya que puedes tener conversaciones reales.
Y si quieres dar un paso adicional y eres más extrovertido, ¿por qué no investigar dónde se encuentra el barrio italiano/chino/alemán más cercano? Aunque no lo creas, en tu propia ciudad seguro hay por lo menos una persona que habla el idioma que deseas aprender y puede serte de gran ayuda tenerlo como amigo.
3. “Pregunta todo”
¿A quién no le ha pasado? Estás en un salón de clase, en pleno curso de inglés en Madrid. Tu profesor acaba de explicar qué son los phrasal verbs y dio ejemplos. Al finalizar, pregunta si hubo alguna duda. Nadie levanta la mano, tú tienes cientos de preguntas, pero por miedo a ser la burla, decides no preguntar. Te dices que lo buscarás luego, al llegar a casa, pero en el camino otras preocupaciones te ocuparon la mente y olvidas buscarlo. Es muy común y yo lo he vivido, pero si algo he aprendido, es que el que realmente desea aprender, debe aprender a preguntar.
Aunque no lo creas, no eres la única persona con esa duda y probablemente tengas alguien al lado que teme levantar la mano tanto como tú, ¡alza la mano y sé su héroe! Si no encuentras preguntas al momento de la clase, tómate un momento luego de ella para repasar tus notas e indagar si hay algo que no te haya quedado del todo claro. Incluso si no estás en un curso de idiomas porque estás aprendiendo por tu cuenta, en la web hay muchas páginas y foros dedicados a responderlas. Haz una lista con todas las preguntas, por insignificantes que te parezcan e investiga tanto como puedas hasta que quedes completamente satisfecho.
4. “Desarróllate integralmente”
En cuanto a mí, me gusta más el inglés escrito. Me apasiona aprender sobre ortografía, leer libros y escribir también, como podrás notar. Tengo una amiga cuyo fuerte es el listening en francés, actualmente trabaja para una embajada sirviendo de traductora y tiene que escuchar largos discursos para luego traducirlos al español. Cuando estaba en su proceso de aprendizaje, a cada rato la veíamos rentando DVD con películas y series en el idioma del amor. Un amigo, en cambio, es el parlanchín del grupo y prefiere el alemán en su forma hablada. Su grupo favorito es Rammstein y yo siempre bromeo diciéndole que parece estar escupiendo o insultando al hablar.
¿Qué tenemos en común? Que independientemente al segundo idioma de cada uno, todos amamos aprender nuevas lenguas, y a pesar de nuestras preferencias sabemos que es imposible considerarse un bilingüe si no te desarrollas de forma integral en dicho idioma. Esto quiere decir que necesitas tomarte tu tiempo para dedicarte a cada habilidad, aunque le des prioridad a una.
Si crees que puedes aprender un nuevo idioma sin leer nada en él, solo con material audiovisual, estás descuidando una parte importante que son las reglas ortográficas que rigen dicha lengua. De igual forma, si te sientes purista y consideras que todo el conocimiento que necesitas se encuentra en los libros, al momento de conversar vas a perder el hilo en la pronunciación.
5. “Conversa tanto como puedas”
Hace un rato te aconsejé que investigaras dónde está el barrio más cercano con personas del país donde se hable el idioma que buscas aprender. Eso se relaciona mucho con este consejo ya que cuando inicias tu aprendizaje, tienes que tener como meta a corto plazo ser capaz de mantener conversaciones con personas que tengan este idioma como nativo.
Un paso que te puede ayudar a conseguir esto es unirte a un conversatorio en la lengua que tienes en mente dominar. Hablar con personas que estén aprendiendo, como tú, te ayudará a ir perdiendo los nervios para luego conversar de manera fluida.
Un excelente tema de conversación es hablar sobre las diferencias culturales entre ambos países, prepárate con tiempo en las posibles preguntas que podrías hacer y luego déjate llevar. Recuerda que esa persona, como tú, en algún punto tuvo que aprender un idioma nuevo también, así que no te va a juzgar si cometes errores al hablar. Pasado un tiempo y con la suficiente confianza, puedes pedirle que te corrija, así aprenderás los errores en los que caes y podrás evitarlos.
Si no te sientes confianza al principio para lanzarte de lleno con un total extraño, puedes intentar, como yo, dirigirte a la embajada de dicho país. Estas personas tienen vocación para la atención al público, por lo que harán todo lo posible por hacerte sentir confiado, aunque hables como un niño de 5 años. Recuerda que incluso por internet puedes hacer amigos con los que hables, eso sí, ¡con mucho cuidado! La web puede ser un mundo loco.
6. “Busca tu propio método”
Hay muchas formas de aprender un nuevo idioma, algunas tan tradicionales como un profesor, un pizarrón y lecciones de ortografía. Otras menos tradicionales como aprender inglés con un comediante y vídeos en Youtube. Cada quién tiene su forma de aprender y tienes que buscar las que mejores resultados te dé.
Si eres una persona que ame la tecnología, tal vez lo tuyo sea descargar apps como Duolingo. Si te encanta la literatura, tal vez aprendas leyendo los clásicos de la literatura anglosajona. Películas, podcasts, crucigramas, sopas de letras, post its por toda la casa con los nombres en el idioma que deseas aprender. Incluso puede que lo tuyo sea componer canciones cuyas letras contengan las lecciones más complicadas de entender. Todo es válido y el cielo es el límite. Si sientes que algo te funciona, aplícalo.
7. “No dejes de practicar”
Ahora que ya dominas mejor el idioma que escogiste, quizás pienses que ya terminaste tu trabajo. Lamentablemente, tenemos que traer de regreso a nuestro amigo intelectual porque aprender un nuevo idioma puede ser rápido y no llevarte toda una vida, pero si dejas de usarlo y lo excluyes de tu día a día, tus conocimientos se irán oxidando y perderás las habilidades que tanto esfuerzo y dedicación te tomó dominar.
No, no es como aprender a manejar bicicleta que nunca se olvida, esta nueva lengua sí la puedes olvidar. Así sea contigo mismo frente al espejo, procura hablarla. Sigue leyendo libros y revistas, viendo tus series sin subtítulos y escuchando la radio de tu preferencia. Y sigue leyendo los artículos que traemos para ti, con los mejores consejos para dominar el inglés. Si finalmente te decides por tomar un curso de inglés en Madrid, nuestro equipo de profesores americanos nativos te esperan en EXAM Madrid Academy.
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